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Ojos cansados




Con los ojos cansados

vas echando raíces en el horizonte

con un dolor que pare gotas del recuerdo

mientras lloras

y maldices

las tierras lejanas

las que agrietan tu ausencia,

como un templo vacío

en el que los años se han ido desparramando

bajo la sombra que agujerea la conciencia

y encadena la huida

manchando la tierra

de huellas que huyen

hiriendo la muerte

mientras grita el alma.


Y lo lejos se hace infinito

y se vuelve sueño,

un sueño que adormece

desterrando el alma del viajero

como una sangre extraña

que se va envenenando de nostalgia

cuando la ciega mirada

 se vuelve olvido

y los ojos se duermen

desvaneciendo su rabia.

Comentarios

mabrito67@gmail.com ha dicho que…
Enhorabuena, Marcos. Bien captada la esencia de esa mirada. Más allá de los ojos que la contienen
Inma Vinuesa ha dicho que…
Estoy emocionada, tienes una sensibilidad tan grande que haces que tu poesía atrape el alma del que te lee.

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